Entrevista a Pilar Ferrer Navarro: 'Caminar el tiempo'

Entrevista a Pilar Ferrer Navarro: ‘Caminar el tiempo’

Buenos días, Pilar. Después de debutar con Poemas de la consumación, regresas con unos versos cargados de música, mitología y filosofía bajo el nombre Caminar el tiempo. Tal y como puede deducirse, el tema principal alrededor del cual giran los poemas es el tiempo. Cuéntanos, ¿de dónde surgió la idea?

El libro surge a partir del tema Coming Home, del grupo de metal industrial sueco PAIN, que pertenece al álbum homónimo lanzado en septiembre de 2016. La letra de la canción habla sobre el paso del tiempo. A partir de esa letra, que se divide en tres partes, se estructura el libro:

En la primera parte, aparecen el ímpetu de una juventud que sueña con cambiar el mundo y el ansia de experiencias nuevas. Vehemencia, rebeldía, experimentación sin miedo al peligro. En la segunda parte, el choque con la realidad. Se pierde el idealismo e incluso aparece la amargura. Hay que luchar cada día, la vida no es como la habíamos soñado. Pero todavía quedan fuerzas, un hilo de esperanza al que asirse. La última parte es la etapa de la madurez nostálgica. Esto es lo que hay: el día a día, la rutina, el cansancio… y la añoranza de una infancia idílica, simbolizada en la vuelta a casa. Un hogar que ya no existe salvo en la memoria.

¿Cuándo y por qué empezaste a escribir poesía?

En realidad, no recuerdo exactamente cuándo comencé a escribir. Sé que fue en algún momento de la adolescencia, impulsada por la necesidad de expresarme. Me resulta mucho más fácil trasladar mis reflexiones a poemas que a prosa. Creo que la libertad y la posibilidad de condensar pensamientos y sensaciones en unos pocos versos es lo que me atrajo de la poesía.

¿Cuáles son tus principales influencias? ¿Qué autores nunca faltan en tu biblioteca personal?

He leído de todo: desde los simbolistas franceses (Rimbaud, Mallarmé, Baudelaire) a los románticos ingleses (Lord Byron, Shelley, Keats), pasando por Blake, Poe o Shakespeare. También me han interesado Cernuda, Blas de Otero o Leopoldo Mª Panero, por poner solo unos ejemplos.

Como decíamos al inicio, los poemas de Caminar el tiempo respiran la magia de la mitología, en concreto, de la nórdica y la celta. ¿Qué te llama más la atención de esas historias? ¿De dónde viene tu interés por la mitología?

Me interesaba la simbología del cuervo a través de la mitología. Una parte de los poemas tienen en común la figura del cuervo como una especie de alter ego, de guía o de conciencia. En ese sentido, la mitología nórdica lo describe perfectamente, situando al cuervo como el pensamiento y la memoria que guían y aconsejan al dios Odín. Todas las mañanas parten a recoger información y regresan al anochecer para informar a Odín.

El cuervo también aparece en la mitología celta de la mano de Morrigan, diosa celta de la muerte y la destrucción, que toma la forma de cuervo en las batallas. Morrigan está presente en todo conflicto, pero a la vez es una fuente de renovación, puesto que, para los celtas, la muerte no significa el final, sino el inicio de un nuevo ciclo.

La mitología me cautiva no solo por el simbolismo poético, sino por la interpretación del mundo que subyace a cada tradición mítica. El mito resulta así una forma de situarse ante el mundo, prerracional y, de alguna manera, más primigenia. En un mundo sujeto a la razón y a la prevalencia de la experiencia científica, la mitología resulta una fuente alternativa de conocimiento y de explicación de la realidad histórica, pero también una especie de arcano misterioso que me parece muy atractivo.

Otro elemento fundamental para entender Caminar el tiempo es la música. ¿Te gusta escuchar a tus grupos favoritos mientras escribes? ¿Cuál es tu banda sonora habitual?

No suelo escuchar música mientras escribo; en realidad, no me gusta que la música esté sonando de fondo mientras realizo cualquier otra tarea. Prefiero concentrarme en los sonidos y perderme en ellos, así que el acto de escuchar música merece toda mi atención.

Me encanta la música antigua (medieval, renacentista y barroca), pero convive con música contemporánea y con mucha música rock. Desde The animals o The Doors hasta el folk, viking o pagan metal.

Efectivamente, el libro destila mucha música: hay referencias a las Cantigas de Alfonso X el Sabio, al romanticismo (la sonata Undine, de Reinecke), a las óperas de Puccini, a la música contemporánea (Il canto sospeso, de Luigi Nono). También aparecen muchos grupos de metal: Tyr, Eluveitie, Nightwish, Apocalyptica, In Extremo, Haggard; la música gótica o distintos festivales de rock, como Wacken, que se celebra en Alemania. No es más que un reflejo del eclecticismo que convive en armonía en mi reproductor.

Al principio de la entrevista, hemos mencionado tu debut con Poemas de la consumación. Háblanos de este primer libro. ¿Qué supuso para ti?

El primer libro fue una recopilación de escritos de momentos vitales distintos. Era más tierno, más ingenuo e inocente en muchos aspectos; también más romántico. La idea de verlo publicado era algo que nunca me había planteado, así que supuso una autoafirmación y una toma de conciencia: publicar no era un imposible, pasaba a ser algo tangible e, incluso, hubo lectores interesados en mis textos.

Han pasado casi diez años entre Poemas de la consumación y Caminar el tiempo, ¿en qué crees que has cambiado? ¿Cómo ves a la Pilar Ferrer del pasado y la de ahora?

Obviamente, diez años dan para mucho. Son más experiencias vitales, tanto para lo bueno como para lo malo. A medida que pasa el tiempo, veo crecer la añoranza de la inocencia, del espíritu reivindicativo y fuerte de la adolescencia. Sin embargo, esencialmente soy la misma persona: mis valores y mis principios no han cambiado sustancialmente.

El libro transmite esa añoranza, así como el cansancio y la decepción que se van acumulando con el paso del tiempo, pero también comunica la necesidad de seguir luchando sin traicionarse a uno mismo. La vida, en definitiva, no es más que la búsqueda íntima y personal de la propia identidad.

Dos libros publicados y, con ellos, la confianza de dos editoriales. ¿Cómo es la experiencia de publicar bajo un sello editorial?

No nos equivoquemos, trabajar con una editorial de relumbrón es una quimera. Pero existen multitud de pequeños editores, serios, honestos y con un proyecto sólido, capaces de ofrecer a un autor novel los recursos y el respaldo necesario para ver tu obra publicada. En todo caso, debes tener las ideas claras y defender tu visión del libro. Al final, es realmente satisfactorio tenerlo en las manos y ver realizado un sueño. A partir de ahí, hay que luchar para conseguir difusión y visibilidad.

Si pudiéramos caminar el tiempo, ¿en qué etapa te gustaría quedarte y por qué?

No reniego de ninguna de las etapas de mi vida porque todas ellas conforman lo que soy en la actualidad. Creo que no volvería al pasado, que mi presente es suficientemente rico como para disfrutar cada día con intensidad.

Una vez publicado Caminar el tiempo, ¿en qué estás trabajando en la actualidad? ¿Seguirás con poesía o darás el salto a otros géneros?

Ahora mismo estoy disfrutando de todo lo que Caminar el tiempo me está ofreciendo. Necesito tiempo para digerir las cosas y descanso para resetear y coger energía. Así que, de momento, no tengo ningún otro proyecto en marcha. Seguiré escribiendo, seguro, porque forma parte esencial de mi vida y continuaré con la poesía porque me ayuda a ordenar y entender el mundo.

En cuanto a trabajar otros géneros, hay por ahí algún relato corto y algún cuento, pero no me siento suficientemente preparada para dar el salto… todavía.

Nombre: Pilar Ferrer Navarro.
Género: poesía, prosa poética.
Bio: Pilar Ferrer Navarro nació en Carlet (Valencia). Es Máster Universitario en Gestión Cultural, Licenciada en Filosofía y Profesora de Flauta Travesera. Con la música a cuestas desde la infancia, ejerce como docente en Enseñanza Secundaria. Lectora ferviente y apasionada, dio el salto a la escritura con la publicación de Poemas de la consumación (Entrelíneas Editorial, 2007). Vive a caballo entre los kakis y los naranjos de su mediterráneo natal y el mar de viñas de Villarrobledo (Albacete), donde ha aprendido a amar el buen vino. A principios de 2018, ha publicado Caminar el tiempo con Uno Editorial.

Libro: Caminar el tiempo